22 marzo 2007

El Nuevo Día



Imagen : tehranshake.files.wordpress.com/
Texto: Fuente Wikipedia en varios idiomas

En estos días se ha celebrado el año nuevo de muchas regiones del mundo. Regiones hoy calificadas negativamente según gran parte del mundo occidental pero que tienen más 3000 años de historia detrás de ellos.

El día 21 de marzo a la 1 y 7 minutos de la madrugada entramos oficialmente en la primavera aunque llevemos un tiempo viendo que la naturaleza ya lo había hecho. Mas bien, hemos p asado de otoño a primavera pero bueno no es lo que hoy quería contar.

En muchas Zonas del Mundo tales como Irán, Azerbaiyán, Afganistán, Pakistán, partes de India, de los kurdos o en Turquía y algunos países de Asia Central. Vamos en general todo lo que fue el imperio persa y su círculo de influencia. La entrada del equinoccio se considera el nacimiento del año. A esta festividad se la llama Noruz o Norouz (En español se pronunciara como la primera versión) se escribe نوروز en persa y significa nuevo dia en el persa moderno. La palabra viene del avestaní nava=nuevo + rəzaŋh=día/luz del día. Otros nombres que recibe la fecha son Nevruz o Bayram en turco y Newroz en kurdo

Noruz se ha celebrado durante al menos 3000 años y está fuertemente arraigado en los rituales y tradiciones del zoroastrismo.
Para los seguidores de la variante Fasli del calendario zoroástrico el Noruz es el primer día de su año. Otras variantes del calendario zoroástrico celebran el Noruz dos veces, una como el Jamshedi Noruz el 21 de marzo como el comienzo de la primavera, y un segundo Noruz en julio o agosto (ver Variaciones del Calendario Zoroástrico).
Los seguidores de la Fe Bahá'í, una religión originada en Irán, celebran este día (llamándolo "Naw Rúz") como una festividad religiosa que marca el año nuevo segundo el calendario Bahá'í y también el final del Ayuno de los Nueve Días. Los bahaíes persas observan muchas costumbres relacionadas con él, pero los bahaíes de otros lugares lo celebran como un día festivo de acuerdo con las costumbres locales. Las comunidades bahaíes americanas, popr ejemplo, suelen tener una comida sin cumplidos, junto a oraciones y lecturas de la escritura bahaí. Mientas que el Naw Rúz, de acuerdo con la escritura, comienza en el equinoccio de primavera, los bahaíes lo celebran el 21 de marzo, independientemente del día en el que caiga el equinoccio. Ese día no pueden trabajar ni asistir a la escuela.
En la antigüedad todos los países y regiones de la Persia acudían a la ciudad ceremonial de Persepolis a llevar los presentes por el año nuevo al rey persa. Todos ellos están esculpidos en los pasillos y escaleras de los restos de la ciudad hoy en día patrimonio de la humanidad por la UNESCO.
Los eventos relacionados con este año nuevo según los persas son por orden la decoración del Haftsin, Chahârshanbe Sûrî, Sizdah Bedar, etc.
El primero podría entenderse como la decoración del árbol de navidad o la colocación del Belén para los cristianos. Se trata de una mesa en la que no pueden faltar 7 (haft) objetos que empiecen su nombre por “S” (Sin) de ahí su nombre. Normalmente esos objetos son:

sabzeh – Algun brote verde- simboliza el renacimiento
samanu – Una especie de “natilla” muy dulce – simboliza la afluencia
senjed – el fruto seco comestible del árbol del paraíso - simboliza el amor
sîr - ajo – simboliza la medicina
sîb – manzanas (rojas a ser posible) - simboliza la belleza y la salud
somaq – fruto del sumac – Simboliza el color de la sonrisa
serkeh - vinagre – simboliza la edad y la paciencia
Otros objetos que suelen haber:
Sonbol – Jacinto
Sekkeh - Monedas -
Dulces tradicionales como el baghlava, naan-nokhodchi, etc.
Frutos secos
Velas – simboliza luz y felicidad
Espejo – Vease monedas
Huevos decorados – simbolizando la fertilidad
Un poco de agua con algo rojo dentro, normalmente un goldfish (Vida dentro de la vida, y el símbolo de piscis que se abandona)
Agua con una naranja flotando en su interior como simbolo del mundo flotando en el espacio
Agua de rosas – Poder purificador
Un libro sagrado de segun la fe que se tenga. O en su defecto un libro de poesia como el Divan de Hafez del que se leen extractos o el Shahnama donde su protagonista es el Heroe Rostam (como hercules)

Chahârshanbe Sûrî
Es la noche previa al ultimo miércoles del año. En esta noche se celebra que la luz vence a la oscuridad y es una tadicion remontada a la epoca de Zoroastro. Se suelen hace fuegos y saltar sobre ellos mientras se canta (san juan en españa). Como todas las festividades regionales se reparten dulces tradicionales y frutos secos. Esa noche somos visitados por nuestros ancestros.

Khane Tekani
Con la llegada del nuvo año se intenta purificar la casa y por ello se limpia exageradamente la casa. Es como una mudanza a tu nueva casa que es la misma pero esta vez limpia de todo lo oscuro que la llenaba. Se renace en la casa. Para ello hasta las ropas puestas en las festividades ha de ser nueva. Todo tiene que estar reluciente. Después de la gran limpieza de cuerpo, mente y hogar se procedera a la colocacion del Haftsin.

Sizdah Bedar
Se traduce como el “decimotercero a la puerta”, trece días después de la fiesta de fin de año se acaban las festividades y este día se celebra tirando el sabze el haftsin en algún río o mar para que el agua se lo lleve. Este día es muy celebrado y se canta y baila en todos lados. Durante estos 13 días el sabze ha recogido todo lo enfermizo y malo que nos va a ocurrir ese año por eso es tan importante expulsarlo.

Un personaje famoso durante estas celebraciones es Amo noruz que es quien nos trae los regalos a los peques de la casa. Si, yo quiero regalo y soy peque que pasa? No puedo? Jajajaja Hâjji Fîrûz es otro de los personajes, este es más cómico. Representa el dios sumerio del sacrificio. En los teatros suelen haber actuaciones donde el “trabajador Firuz” ironiza a su señor. Suele ir pintado de negro y vestirse de color rojo. Hasta en las calles se montan pequeños escenarios con mayor o menos éxito y calidad representando esta escena. Aunque su raíz es mucho mas simbólica y mística.

04 marzo 2007

Compañero del viento


Texto: Mortezá Kají
Imagen: Portada de su libro Ed. del oriente y mediterráneo

Un vuelo en el firmamento de la poesía de Kiarostami.


Aunque alegre y riendo he nacido de la inexistencia
el amor me enseñó a reír de otra forma

Rumi

La característica fundamental del cine de Kiarostami es el modo de ver y mostrar. La poesía de Kiarostami es la continuación natural evolucionada de su cine, donde naturaleza y destino se unen, se evita la presunción de enseñar al interlocutor y no se aspira a un estrato superior, la maestría en el trabajo. La esencia de su poesía reside en la misma sencillez, sinceridad y precisión. En este sentido llega a niveles a los que no necesariamente podría llegar con el cine. ¿Por qué?

Primero: En los horizontes transparentes y libres de la poesía, él está solo y puede poetizarse a sí mismo tal y como es. Ya no se ve limitado por las dimensiones fatales del campo de las producciones audiovisuales. Las leyes férreas de la naturaleza no obstaculizan su camino. La presión del capital no lo limita, las personas y los medios de la industria de producción no suponen impedimentos. En el universo de la poesía, para registrar sus producciones, sólo necesita la pluma y el papel, y nada más. Cuando los conceptos paradójicos llegan a sus manos, él vierte estas fantasías del pensamiento en la lengua adecuada, la más sencilla y concisa del idioma, los deposita en el papel y la tarea concluye. Lo que se produce en poesía no es un intercambio con la gente, sino compañía, y, por ello, su poesía nace desnuda, libre, sencilla e inteligente, ajena a toda métrica que haría sufrir a la esencia pura de la lírica no recubierta de máscara. En su poesía no se da una visión, como en el cine, lujosa y adornada. No le preocupan las formas sencillas y complejas de los conceptos ni del idioma, ni las técnicas del medio, ni las ataduras del ritmo y de la rima. El material que hay en estas tiendas actualmente sirve para los que intentan presentar un concepto muy sencillo con elementos complejos y hacer que la nueva poesía sea más poética.

Segundo: Hace ya mucho tiempo que la época de la generosidad, la paciencia y la tolerancia cara a la manifestación verdadera y majestuosa, o bien falsa, de las formas ornamentales y las metáforas adoptadas para la comprensión del mensaje poético ha pasado y no se puede, ni se debe, esperar de las generaciones de hoy y de mañana que colaboren y se esfuercen por descifrar las dificultades léxicas y conceptuales de las cásidas de ritmo largo y complejo de Manucherí o de Jaganí. La poesía de hoy y de mañana, igual que la poesía del pasado, es concorde y adecuada a las necesidades del momento. Así pues, puede y debe ser como un relámpago que aparezca entre dos profundas y vastas oscuridades que se sitúan antes y después de aquel instante luminoso sorprendente y repentino. Esta clase de poesía es como una presencia breve y pura entre dos largas ausencias. El interlocutor futuro, sin paciencia y sin aguante, sólo tendrá la oportunidad de captar ese instante repentino y luminoso en su mente. Entonces, en un momento adecuado, se sentará y perseguirá el movimiento de ese instante y, con gusto, compondrá un poema como éste:

Siguiendo el espejismo
llegué al agua
sin sensación de sed

Se trata de un poema que está lejos del arcaísmo verbal y mitológico y del tecnicismo y, al contrario, lleno de sencillez y sinceridad. El interlocutor de esta poesía, el interlocutor de Kiarostami, igual que el de su cine, tiene un papel destacado y merecido respecto a aquello a lo que apunta la obra, lo cual significa respeto hacia el interlocutor a fin de que éste no sea consumidor como un mero consumidor sin voluntad. Kiarostami, en su escritura, en vez de responder o concluir fomenta en su interlocutor una interrogación parecida a la que se halla en los diálogos platónico-socráticos, y de este modo, sin sobornar al interlocutor, comparte con él el botín de su obra. Su pensamiento, que podría ser emotivo y tranquilo, se convierte en tormentoso e intelectual, de este modo advierte al interlocutor que la poesía es una pregunta continua, con un valor que se eleva por encima del reino de la palabra, y que el juego de las palabras es un fenómeno peligroso en el campo de la estética lírica.

Con la poesía de Kiarostami hay que intimar poco a poco y con calma, lo que exige comprender la necesidad de la poesía en el mundo actual. La suya no es una pieza literaria sin origen ni vínculos, es una obra inteligente, noble y con raíces. Se apoya en el ayer pero mira hacia el mañana y pasa por el sendero que será la vía válida para el futuro. La consolidación gradual de este tipo de poesía arroja a muchos versificadores o creadores de estilo fuera del campo de la poesía hacia el terreno del silencio y, al mismo tiempo, a muchos talentos silenciosos les pone una y dos palabras en la boca y les enseña a expresarse. La poesía mientras sea, hasta este punto, sencilla, desnuda e hija del tiempo no está pendiente de lo antiguo y lo moderno y, en vez de ello, se plantea lo genuino y lo absurdo. Si una poesía es genuina es nueva y seguirá siendo nueva, pero si es absurda, nace muerta. En el futuro no habrá oportunidad para dedicarse a la poesía mediocre y absurda.

En cuanto a la forma, para los que no tienen tiempo de concretar o carecen de aptitud crítica, es posible que les nazca la duda respecto a si esta clase de poesía es una imitación de otras, como el haiku o el josravaní del Irán de antes del Islam o los shatiat (dislates) de los místicos (tan semejantes estos dos últimos metros a la conocida estrofa japonesa), de los nuevos josravaníes de Ajaván Salés o cosas semejantes. Pero los exquisitos comprenden que este género literario, por próxima que esté a este tipo de poesía, es algo nuevo. Es indudable que los poemas de Karostami están vinculados a la cultura originaria de Irán y puede decirse que se acercan a los josravaníes por su forma y a los shatiat de los místicos por su contenido, con la diferencia de que estos dislates, que parten de un concepto metafísico, miran al cielo y sus versos son hijos de la tierra y plasman la historia de la vida.


Un potrillo blanco
viene de la niebla
y desaparece
en la niebla.
*
Nieva
nieva
nieva
el día se pone
nieva
noche
*
Huella de un transeúnte sobre la nieve
¿Algún trabajo lo ha requerido?
¿Volverá?
¿Por este mismo camino?
*
El cementerio
todo
nevado
sólo la nieve de tres losas
los tres jóvenes
se ha deshelado
*
Las nieves
se deshielan de pronto
y de pronto se borran
de los transeúntes las huellas
de la grande a la pequeña
*
La blancura de la paloma
se pierde en las nubes blancas
un día de nevada
*
El sonido del atabal
inquieta
a las amapolas de alrededor del camino
¿Van a volver acaso?
*
Cien soldados todos oído a la orden
van al dormitorio
una noche de luna en ciernes
Sueños rebeldes
*
Un pedacito de nieve
-recuerdo de un largo invierno-
la primavera en sus comienzos
*
Pensamientos amarillos
pensamientos violetas
juntos
y separados
*
La mujer del pelo blanco
contempla las florecillas del cerezo
¿Ha llegado tal vez la primavera de mi vejez?
*
Un viejo monje
aconseja
a los monjes jóvenes
entre los cerezos
os polluelos de un día
experimentaron
la primera lluvia de primavera
*
La mariposa gira en torno a sí misma
sin meta
bajo el suave sol de primavera
*
La primaveral brisa
hojea el cuaderno de deberes
un niño duerme
apoyado en sus manitas…
*
Un viejo monje
desayuna a solas,
el sonido de la tetera hirviendo



Estado de sitio



Texto extraido de: Por palestina, ediciones del oriente y memditerráneo
Imagen extraida de: http://www.document.no

Mahmud Darwish, el poeta enclaustrado en Ramala. Así lo designó Juan Goytisolo en un artículo donde reseña la visita de una delegación del Parlamento Internacional de Escritores del que forma parte a la ciudad de Ramala y a un poeta cercado, como sus tres millones de compatriotas, en una de esas ratoneras a las que se reduce actualmente la Autoridad Nacional Palestina.

En la propia Ramala, Mahmud Darwish compuso en enero de 2002 el poema Estado de sitio del que a continuación entresacamos algunos fragmentos. Después de sus palabras, una más sobraría.


***
Aquí, en la falda de las colinas, ante el ocaso
y las fauces del tiempo,
junto a huertos de sombras arrancadas,
hacemos lo que hacen los prisioneros,
lo que hacen los desempleados:
alimentamos la esperanza.

***
Vosotros, los que os habéis quedado en el umbral,
pasad,
tomaos con nosotros un café árabe
-acaso os sintáis seres humanos como nosotros-.
Vosotros, los que os habéis quedado en el umbral
de las casas,
largaos de nuestras mañanas,
necesitamos creernos
seres humanos como vosotros.

***
Cuando desaparecen los aviones, las palomas alzan
el vuelo,
blancas blancas, lavan las mejillas del cielo
con alas libres, y reconquistan la belleza y el reino
del aire y los juegos. Más y más alto vuelan
las palomas, blancas blancas. Ojalá el cielo
fuera auténtico -me dice un hombre que pasa
entre dos bombas.

***
Al asesino: Si hubieras visto el rostro de la víctima
te lo habrías pensado, te habrías acordado de
tu madre en la cámara
de gas, te habrías liberado de la razón del fusil
y habrías cambiado de idea: ¡así se recobra
la identidad!

***
Le ha dicho una mujer a la nube: cubre
a mi amado,
mojada está mi ropa de su sangre.

***

Si no eres lluvia, mi amor,
sé árbol
cubierto de frutos... Sé árbol,
y si no eres árbol, mi amor,
sé piedra
cubierta de humedad... Sé piedra,
y si no eres piedra, mi amor,
sé luna
en el sueño de la amada... Sé luna.
(Así le dijo una mujer
a su hijo en su entierro.)

***
Bajo sitio, el tiempo se hace espacio,
fósil eternidad.
Bajo sitio, el espacio se hace tiempo,
cita olvidada.


El próximo poema se publicó originalmente en el periódico al-Quds el 21/22 de octubre de 2000; recrea las conocidas imágenes del asesinato, el 30 de septiembre de 2000, del niño Muhammad ad-Durra, acribillado por el ejército israelí en brazos de su padre.


Muhammad


Muhammad,
acurrucado en brazos de su padre, es un pájaro temeroso
del infierno del cielo: papá, protégeme,
que salgo volando, y mis alas son
demasiado pequeñas para el viento… y está oscuro.

Muhammad,
quiere volver a casa, no tiene
bicicleta, tampoco una camisa nueva.
Quiere irse a hacer los deberes
del cuaderno de conjugación y gramática: llévame
a casa, papá, que quiero preparar la lección
y cumplir años uno a uno…
en la playa, bajo la palmera…
Que no se aleje todo, que no se aleje…

Muhammad,
se enfrenta a un ejército, sin piedras ni
metralla, no escribe en el muro: "Mi libertad
no morirá" -aún no tiene libertad
que defender, ni un horizonte para la paloma
de Picasso. Nace eternamente el niño
con su nombre maldito.
¿Cuántas veces renacerá, criatura
sin país… sin tiempo para ser niño?
¿Dónde soñará si se queda dormido…
si la tierra es llaga… y templo?

Muhammad,
ve su muerte viniendo ineluctable, pero
se acuerda de una pantera que vio en la tele,
una gran pantera con una cría de gacela acorralada; mas al
oler de cerca la leche
no se abalanza,
como si la leche domara a la fiera de la estepa.
"Entonces -dice el chico- me voy a salvar".
Y se echa a llorar: "mi vida es un escondite
en la alacena de mi madre, me voy a salvar… yo daré fe".

Muhammad,
ángel pobre a escasa distancia del
fusil de un cazador de sangre fría. Uno
a uno la cámara acecha los movimientos del niño,
que se funde con su imagen:
su rostro, como la mañana, está claro,
claro su corazón como una manzana,
claros sus diez dedos como cirios,
claro el rocío en sus pantalones.
Su cazador debería habérselo pensado
dos veces: le voy a dejar hasta que sepa deletrear
esa Palestina suya sin equivocarse…
me lo guardo en prenda
y ya le mataré mañana, ¡cuando se revuelva!

Muhammad,
un jesusito duerme y sueña en
el corazón de un icono
fabricado de cobre,
de madera de olivo,
y del espíritu de un pueblo renovado.

Muhammad,
hay más sangre de la que precisan los noticiarios
y a ellos les gusta: súbete ya
al séptimo cielo,
Muhammad.


(Traducción de Luz Gómez García)
(Publicado en Nación Árabe, nº 43, invierno 2001)